En Venezuela, los casos de corrupción relacionados con el régimen y su círculo de funcionarios de alto nivel continúan saliendo a la luz. Después de la purga en PDVSA, que resultó en la renuncia de Tareck El Aissami como Ministro de Petróleo y el enjuiciamiento de Joselit Ramírez, superintendente de la SUNACRIP, y el Diputado Hugbel Roa, algunos funcionarios persisten en ejecutar actos corruptos a través de empresas diseñadas para tal fin.
Las investigaciones que llevaron a la detención de la alta dirección de PDVSA estuvieron relacionadas en parte con el saqueo de las empresas básicas del estado, como VENALUM, FERROMINERA, PEQUIVEN y SIDOR, así como otras pertenecientes a la Corporación Venezolana de Guayana (CVG). Estas empresas fueron saqueadas y despojadas de hasta el último tornillo de su maquinaria, que se exportó al extranjero como chatarra, mediante sobornos.
El rol de Bismark Carretero
Bismark Francisco Carretero Reyes es uno de los principales responsables de la red de desmantelamiento y saqueo de las industrias básicas venezolanas. Opera a través de su empresa PEGASUS GROUP N560455, registrada en Panamá. Carretero ha alimentado las cuentas de altos funcionarios militares de Venezuela con sobornos a cambio de guías de movilización desde la CVG hasta los puertos de Guanta y Puerto Cabello, donde adquiere la chatarra que luego revende a precios exorbitantes en los mercados internacionales.
Dentro de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), se libran disputas por el control del poder y de puestos estratégicos que les permitan acceder a fondos generados por actividades ilícitas o que requieran permisos para extorsionar a quienes las realicen. El elevado número de generales en Venezuela, como una medida del gobierno para apaciguar el descontento en sus filas, ha expuesto las rivalidades existentes entre ellos.
Operaciones con chatarra y sustancias ilícitas
Las operaciones terrestres de estas empresas dedicadas a la chatarra han levantado alarmas tanto a nivel nacional como internacional. Varios cargamentos han sido requisados y se han encontrado sustancias estupefacientes en su interior. Esto sugiere una estrecha relación entre estas empresas y actividades turbias que involucran a funcionarios militares del régimen venezolano y de países vecinos.
PEGASUS GROUP es señalada como una de las empresas beneficiadas con contratos bajo, la administración de Pedro Maldonado en la CVG, para el desmantelamiento de la CVG. Además de esto, ha pagado sumas considerables de dinero a funcionarios detenidos para agilizar trámites y acelerar las cargas de su flota de góndolas de transporte.
Este grupo, a través de empresas de fachada y terceros, ha estado adquiriendo tierras y propiedades en La Guaira, Lechería e incluso en Caracas. Su objetivo es la construcción de edificios residenciales, oficinas, posadas y hoteles en medio del escándalo de corrupción en PDVSA que involucra al Grupo HP.
La investigación revela que el pago por la compra de estas tierras se realiza en efectivo en grandes cantidades para evitar dejar rastros y tratar de blanquear capitales.
Una fuente cercana a la investigación anunció que se presentaría una denuncia ante organismos internacionales en busca de una justicia verdadera. Se investigarán cuentas bancarias y se confiscarán los bienes de este entramado corrupto en el extranjero, donde han depositado fondos procedentes de actividades turbias e ilícitas. Estos individuos, bajo la apariencia de empresarios, han traicionado a las instituciones y al pueblo venezolano en su afán de extraer y invertir las riquezas de Venezuela riquezas en el exterior.