Durante siete años, la red de minería ilegal liderada por estos dos peligrosos mafiosos explotó oro en la selva colombiana del Chocó, una gigantesca franja selvática-costera que se extiende desde el Darién, Panamá, hasta Ecuador. Precisamente, la ruta que usan los migrantes ilegales para llegar al territorio norteamericano.
Los dos estadounidenses de origen iraní, representados por la firma de Diego Cadena (uno de los abogados del expresidente Álvaro Uribe), realizaron actividades mineras ilegales. Hassan Jalali y Amir Mohit-Kermani fueron investigados y burlaron la ya muy conocida corrupta justicia colombiana.
Especial Santos Luzardo .- La propiedad donde opera Juan Hidalgo Show Stables, la escuela de equitación de Juan Eduardo Hidalgo, encierra una trama que se extiende hasta un escándalo en Colombia. La fastuosa mansión, ubicada en 5900 SW 123rd Ave, Miami, y hoy valorada en más de 3 millones de dólares, fue adquirida en febrero de 2016 por casi la mitad de su valor actual, por el empresario iraní-estadounidense Hassan Jalali Bidgoli.
Hassan Jalali Bidgoli y Amir Mohit-Kermani residían entonces como millonarios en Miami. Jalali era un desarrollador de bienes raíces que habla un excelente español, seguramente gracias a su matrimonio con una latina.
Jalali renovó una elegante mansión en Miami Beach, comprada entonces en 7.75 millones de dólares por el jugador de baloncesto Victor Oladipo.
Mohit-Kermani es un quiropráctico y forma parte del selecto equipo de “clientes célebres” de Ferrari, un programa que permite a sus socios competir en carreras profesionales y amateurs con el vehículo 488 Challenge de la marca italiana, que alcanza una velocidad máxima de 321 km/h.
La Mafia de Oro y la Impunidad Judicial
Ambos protagonizaron un gran escándalo judicial por minería ilegal que estremeció a Colombia. El origen fueron las “actividades mineras que iniciaron Hassan Jalali Bidgoli (…) y Amir Mohit-Kermani”, según un expediente judicial contra esta temida mafia. Los documentos evidencian que las actividades se llevaron a cabo a través de dos sociedades constituidas en 2011 en Medellín y Quibdó: Tala Internacional Trading S.A.S. y Talbras S.A.S.
Se trata de una organización criminal que extrajo oro sin títulos mineros ni licencias ambientales en la selva del Chocó.
El 5 de diciembre de 2018, un juez emitió 13 órdenes de captura que incluyeron a Jalali y Kermani, según el expediente.
Ambos fueron sujetos de una circular azul de Interpol, que implicaba obtener su ubicación, pero no la extradición ni solicitud de arresto internacional.
Ni Jalali ni Mohit-Kermani fueron condenados. Diego Cadena fue acusado en 2020 por la Fiscalía colombiana en un proceso por soborno de testigos relacionado con el expresidente Uribe.
Tres empresas relacionadas con Jalali tuvieron nombres similares: Talbras, Brastala y Tala. Según fuentes, “Bras” se refiere a Brasil por los dragueros de ese país, y Tala a como se dice oro en persa o farsi, el idioma de Irán.
El oro del diablo y sus versos.
Jalali y Mohit-Kermani explotaban oro ilegalmente en 2010 junto a Juan Carlos Marulanda, un colombiano que fue uno de sus subcontratistas de albañilería en el negocio de la construcción en Estados Unidos, y Josecarlo Souffront, un venezolano radicado en Colombia desde 2009.
El oro era revendido en el mercado negro de Miami. Los socios minoritarios quisieron independizarse y empezaron los conflictos. Fue entonces cuando Jalali y Mohit-Kermani contrataron a sicarios que habían laborado para el Cartel de Medellín, especializados en manejar este tipo de conflictos.
Souffront tuvo que huir de Colombia. La versión oficial dista completamente de la nuestra. Pero este no fue el único incidente. Al menos una docena de pequeños mineros locales terminaron teniendo graves conflictos con los empresarios iraníes. Cuando alguien se oponía a sus prácticas esclavistas, enviaban a guerrilleros o paramilitares para “ajustar cuentas”.
Para junio de 2013, tenían al menos cuatro dragas y ocho retroexcavadoras explotando oro. Nunca contaron con las licencias ambientales respectivas. Los funcionarios encargados de supervisarlos eran sobornados. Apenas fueron multados en un par de ocasiones y, finalmente, los equipos fueron incautados cuando ya eran inservibles, pero habían logrado extraer varias toneladas de oro.
Vida de lujo en Miami
De acuerdo al registro de propiedades de Miami Dade, en la Florida, Estados Unidos, Jalali, su esposa Viviana Vargas y su red de compañías acumulaban 12 propiedades hasta abril de 2021. Los bienes valían 22 millones de dólares. Hassan también tenía dos predios valorados en ese momento por la cantidad de 7,7 millones de dólares, comprados por su empresa Sahel Corp, donde está situado el hotel Ocean Five en Miami.
En la dirección de uno de los inmuebles funcionó una empresa homónima a una de sus sociedades en Colombia: Tala International Mineral Trading Llc. Mohit-Kermani, por su parte, adquirió una casa en Miami en 2004, avaluada en 7,1 millones de dólares.
Jalali ha estado vinculado a al menos 43 compañías en la Florida, de acuerdo con Sunbiz, el registro de empresas de ese estado. Su presencia empresarial se ha extendido también a paraísos fiscales como Bahamas y Panamá.
Jalali y Mohit-Kermani disfrutaron cómodamente de sus lujos. Los autos, las propiedades y su vida en Miami resplandecieron a cambio de la destrucción de la selva del Chocó.
DICTADURA TEOCRÁTICA DE IRÁN MANTIENE BASE DE INTELIGENCIA EN FLORIDA
Las operaciones de esta base de la inteligencia exterior iraní son coordinadas directamente por las Fuerzas Quds, un importante grupo paramilitar de élite considerado como la organización más importante de la República Islámica de Irán, y el Ministerio de Inteligencia y Seguridad Nacional (Irán). Estos únicamente informan al propio Ayatolá Ruhollah Jomeiní, líder supremo.
Nos llama poderosamente la atención la inocultable presencia e influencia de los ciudadanos iraníes en las operaciones de “Juan Hidalgo Show Stables”, algunos de ellos criadores de caballos persas, oriundos de la ciudad iraní de Mashhad, algunos de los cuales son familiares de altos jerarcas del Ejército iraní.
“Juan Hidalgo Show Stables” es una célula de la inteligencia iraní opaca bajo la apariencia de la equitación, donde se captan recursos, reclutan simpatizantes para la causa chií y se recaba información sensible sobre la seguridad interna de los Estados Unidos de Norteamérica, poniendo en riesgo la seguridad nacional.
En futuras entregas pondremos al descubierto otras vinculaciones de estos peligrosos infiltrados en el territorio norteamericano.
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