Una figura controvertida se proyecta desde las sombras en el tablero político de Venezuela: Carlos Sebastián Martel Izaguirre. Casado con la Miss Venezuela 2001, Cynthia Lander, este personaje ha sabido moverse con destreza en las esferas de poder, tanto dentro como fuera de las fronteras nacionales. Bajo la fachada de un bajo perfil empresarial, Martel ha gestado una red de empresas en Venezuela y el Reino Unido, al tiempo que su nombre resuena en los corrillos de la gestión y administración de proyectos.
El sospechoso desenvolvimiento de Martel
La capacidad de Martel para transitar sin barreras por el territorio venezolano, entrelazando negocios con ministerios y unidades militares en Caracas, es indicativa de la amplitud de sus contratos con el Gobierno y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. No obstante, este acceso privilegiado esconde una realidad menos transparente: Martel es señalado por supuestamente transferir información sensible a la oposición y a naciones extranjeras, desdibujando así su lealtad al chavismo que alguna vez dijo defender.
Un episodio que refleja su estrecha relación con figuras de la oposición se dio el día de su matrimonio en septiembre de 2011. La ceremonia, que se celebró en la Iglesia San José de Chacao, contó con la presencia de Leopoldo López, ahora prófugo de la justicia venezolana, su esposa Lilian Tintori, y Roland Carreño, quien en el pasado reciente fuese un activo dirigente de Voluntad Popular, el partido fundado por López. Este entorno de celebración entre figuras opuestas al chavismo dibuja un cuadro de dudas acerca de la verdadera lealtad de Martel.
Pero no es lo único, la esposa de Martel, Cynthia Lander, siempre ha reconocido su amistad con Tintori, junto a quien se le ha visto participando en diversas actividades sociales e incluso protestas, como las escenificadas por la oposición, en las calles de Caracas, en el año 2017.
No es un secreto que a Carlos Martel le atrae el brillo de la farándula, tal como lo demostró su notable matrimonio. Este gusto por resaltar en los círculos sociales quedó evidenciado cuando la prensa de la época se hizo eco del evento, otorgándole titulares en periódicos y portales digitales, subrayando así su afán por la notoriedad.
La vida de Carlos Martel Izaguirre parece una película donde él es tanto el director como el protagonista. Su matrimonio con la ex Miss Venezuela, su presencia en una boda con invitados de alto perfil de la oposición, y su aparición en los medios internacionales retratan a un hombre que disfruta de la atención y utiliza su carisma para influir en su entorno. Sin embargo, este gusto por la notoriedad podría ser una herramienta calculada para fortalecer su posición en los círculos de poder.
La dualidad de un personaje camaleónico
La noche del 6 de diciembre de 2015, cuando la oposición celebraba su victoria en la Asamblea Nacional, Martel no dudó en unirse a los festejos de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Su presencia en dichas celebraciones no pasó desapercibida, especialmente por su pasado en el periodismo, donde, según sus palabras en un reportaje de autoelogio en Fox News, «accidentalmente» contribuyó a la fama política de Hugo Chávez tras documentar el fallido golpe de Estado de 1992.
En el artículo de Fox News, Martel se autodenominó un acérrimo opositor al chavismo, pero su conducta posterior revela una estrategia de doble juego. Tras la derrota de la oposición, Martel adaptó su táctica, ofreciendo su lealtad tanto a los opositores como al gobierno, según le convenga.
Financista de la discordia
Además, Carlos Martel Izaguirre ha asumido un rol aún más polémico al convertirse en el financista principal de María Corina Machado, figura política opositora inhabilitada para las elecciones presidenciales de 2024. Operando entre Venezuela y Miami, Martel ha sostenido una nómina de periodistas, lobistas y algunos políticos que perpetúan la línea comunicacional de Machado, manteniendo su presencia en el debate público contra toda legalidad, pues Mahcado intentó postularse para los comicios presidenciales de 2024, sin estar habilitada políticamente para hacerlo.
Pese a los esfuerzos por ocultar su rastro mediante testaferros, los datos de Martel emergen como directivo de compañías tanto en territorio venezolano como en Panamá y el Reino Unido. En Panamá fue director de SERVITWING INTERNATIONAL, S.A., fundada en el año 2008 y actualmente suspendida, mientras que en territorio británico, esgrimiendo nacionalidad española y teniendo como país de residencia a España, figuró como directivo de la londinense THE NEXEX LTD, creada en 2020 y disuelta en 2022.
En Venezuela, mientras, Martel ha dirigido MD NEXUS PUBLICIDAD C.A., una empresa de publicidad, mercadeo, producción audiovisual, organización de eventos y relaciones públicas. MD NEXUS PUBLICIDAD C.A. también ha estado a cargo de obras de mantenimiento y reparación en lugares emblemáticos de Caracas. MD La compañía se ha visto envuelta en demandas laborales.
MD NEXUS PUBLICIDAD C.A. surgió de una sociedad entre Carlos Martel y Fernando Duprat. Las iniciales de sus apellidos, Martel y Duprat (MD) constituyen el nombre de la compañía, que ha tenido entre sus clientes a la estatal petrolera venezolana Pdvsa. Además de Caracas, Nexus, que es como comúnmente se conoce a la firma, cuenta con oficinas rentadas en Miami y en Nueva York, ciudades donde la empresa ha desarrollado parte de su actividad operativa.
Para el año 2010 Martel realizó un «aporte especial» a la Universidad Central de Venezuela, específicamente a la Escuela de Comunicación Social.
El hecho de que Martel mantenga relaciones tanto con el chavismo como con la oposición pone en evidencia su capacidad para operar en un terreno de ambigüedades y dobles juegos. La pregunta que surge es inevitable: ¿es Carlos Martel Izaguirre un estratega empresarial o un oportunista que navega las turbulentas aguas de la política venezolana en busca de su propio beneficio?
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